Aplicaciones de la transferencia térmica paquetes de envíos
Parece magia, pero no lo es. Luego de una compra en línea,contar con el stock suficiente para abastecerla y empaquetar muy bien cada producto para que llegue a destino en buen estado no es suficiente; también es necesario asegurar que el paquete sea identificable (principalmente cuando posee piezas frágiles o requiere de un manejo especial) y rastreable, para que no se pierda en el camino.
Para lograrlo, es necesario utilizar etiquetas de envíos, las cuales aseguran la identificación y rastreabilidad del paquete. Pero, para cumplir adecuadamente su función, estas etiquetas deben poseer algunas características especiales, pues no se trata simplemente de elementos identificadores, también deben ser resistentes a la exposición al sol, a la convivencia con agentes químicos, y en general, al ajetreo que implica un viaje que, en ocasiones, puede prolongarse durante varios días.
Sabiendo esto, la etiqueta de envío se convierte en un elemento central del proceso. El tamaño y calidad de la impresión de los datos que posee son cruciales para ser detectables, tanto a simple vista como bajo un lector de código de barras. Así que, para garantizar la calidad de lectura de dicha información, es importante seleccionar la tecnología de impresión, la etiqueta y la tinta adecuadas.
Como dijimos antes, las condiciones del transporte y las numerosas etapas de manejo de los paquetes en su trayecto, pueden generar abrasión e impacto entre unas cajas y otras, con lo cual, el mensaje impreso en las etiquetas puede degradarse, alterarse o simplemente borrarse frente a condiciones climáticas adversas, como la humedad, la luz ultravioleta e incluso al agua de lluvia o al derrame de líquidos procedentes de otros paquetes.
De ahí la relevancia de que los paquetes de envíos sean etiquetados con materiales de buena calidad, pues de lo contrario, la información logística y los datos de rastreabilidad pueden borrarse y provocar tanto retrasos en la entrega como la pérdida de los productos que fueron enviados.
Afortunadamente, la impresión por transferencia térmica ofrece la calidad y la resistencia necesarias para que las etiquetas de paquetes de envío cumplan su función de forma eficaz, y superen sus limitaciones, tanto para viajes de corta duración como para entornos logísticos exigentes, e incluso, internacionales.
De hecho, la industria logística mundial está imponiendo cada vez más candados y medidas de seguridad, que requieren el empleo de etiquetas más resistentes hechas de papel estucado, que no es otra cosa que un papel recubierto por varias capas de celulosa que lo vuelven más resistente, y que en combinación con una cinta de cera de alto rendimiento o cinta de cera-resina, logran la durabilidad deseada y necesaria para estos casos.
Es así como la tecnología de transferencia térmica es, además de totalmente compatible con las necesidades de etiquetado que exige el entorno actual, la solución ideal tanto para grandes empresas como para emprendedores que están lanzando sus productos al mercado, pues los costos de mantenimiento de sus dispositivos y los suministros empleados para etiquetar, son muy accesibles en términos económicos, ayudándoles a ahorrar costos al mismo tiempo que se modernizan e incrementan su eficiencia.
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